Sufridas voces de tierras lejanas golpean mis oídos.
Si su dolor lo siento como mío, es buena señal, mi alma sigue viva.

Teodoro Obiang, el 3 de agosto de 1979, derrocó al anterior dictador Francisco Macías Ngema, quien fue parte de las luchas por la independencia de Guinea Ecuatorial, reconocida por España en marzo de 1968.

Wikipedia define el estado social y político actual de esta hermosa nación de África Central:
Guinea Ecuatorial tiene uno de los peores registros sobre derechos humanos en el mundo según el informe anual sobre los derechos políticos y civiles de Freedom House. Reporteros sin fronteras sitúa al presidente Teodoro Obiang Nguema Mbasogo entre los «depredadores» de la libertad de prensa. El informe de Estados Unidos sobre tráfico de personas de 2012 dice que «Guinea Ecuatorial es una fuente y destino para las mujeres y niños sujetos a trabajo forzado y tráfico sexual». El informe sitúa a Guinea Ecuatorial como un país Tier 3, el ranking más bajo, en donde se encuentran los países «cuyos gobiernos no cumplen los estándares mínimos y no están haciendo esfuerzos significativos para cumplirlos». Actualmente Guinea Ecuatorial está bajo lo que muchas fuentes consideran una dictadura militar que ya lleva unos 35 años en el poder. (SIC Wikipedia)

En este marco, el pasado 24 de abril de 2016, se realizaron las elecciones presidenciales en las que Teodoro Obiang triunfó al acumular el 98% de los votos.

La abstención fue del 65% y el único partido verdaderamente opositor, Ciudadanos por la Innovación (CI), fue impugnado por una ley que obliga a arraigar la candidatura durante cinco años para poder postularse, para lo cual obviamente se debe habitar en el país.

Gabriel Nsé, líder de CI, con el respaldo de los gobiernos de España –país de su añoso exilio– y EEUU logró retornar al país y presentar su postulación. La aceptación y el respaldo del pueblo a su candidatura alertaron al gobierno, el cual lo proscribió acusándolo de ser un “movimiento guerrillero”. Basados en esta falsa acusación, el jueves 21 de abril, sitiaron la sede del CI y atacaron a más de doscientas personas –que aún permanecen en su interior, incluyendo niños y mujeres– con balas de plomo y lluvias de granadas de gases lacrimógenos que soltaron desde helicópteros durante la noche, además de impedir el suministro de agua –no existe agua corriente– y el acceso a alimentos.

También encarceló a más de cuatrocientos simpatizantes y directivos del CI y los torturó de manera salvaje, algunos de los cuales se encuentran en estado de coma y otros murieron.

Tras los comicios fraudulentos abalados por representantes de naciones cómplices, socias comerciales que garantizan al tirano siete años más de impunidad, el dictador Teodoro Obiang anunció el severo castigo que impondrá a los opositores encarcelados y sitiados, remarcando especialmente en su mensaje cuán implacable será con el líder opositor.

Conocí a Grabriel Nsé hace años durante su exilio en España; mi amigo José María Romo, su pastor, fue quien nos presentó. Durante aquellos días de dolor y desarraigo, conoció a JESÚS y se bautizó un domingo en el que tuve el honor de predicar en al Iglesia Betel de Zaragoza.

Estrategias y luchas en oración llevaron a este varón a estas instancias, estando dispuesto –como me lo expresara muchas veces– a dar la vida por la libertad de su pueblo.

Recuerdo las palabras del Reverendo Martín Niemöller (1892-1984), un pastor luterano alemán, fundador junto a Dietrich Bonhoeffer del movimiento de la Iglesia Confesante que se opuso al nazismo y sus crímenes:

“Cuando los nazis vinieron a llevarse a los comunistas, guardé silencio, porque yo no era comunista.
Cuando encarcelaron a los socialdemócratas, guardé silencio, porque yo no era socialdemócrata.
Cuando vinieron a buscar a los sindicalistas, no protesté, porque yo no era sindicalista.
Cuando vinieron a llevarse a los judíos, no protesté, porque yo no era judío,
Cuando vinieron a buscarme, no había nadie más que pudiera protestar”.

Este pensamiento es inexactamente atribuido al dramaturgo y poeta Bertolt Brecht (1898-1956), de quien puedo citar tres frases que clarifican este horrible momento:

“Las revoluciones se producen en los callejones sin salida.”
“Desgraciado el país que necesita héroes.”
“Cuando el delito se multiplica, nadie quiere verlo”.

ES HORA DE ORAR.
ES HORA DE HABLAR.

Nuestros hermanos lo necesitan, no podemos ser indiferentes.

Firmá la petición ante el gobierno de España, procurá divulgar los acontecimientos, instá a tus gobernantes a manifestarse… no te dejes caer en la condenación de la indiferencia y la omisión (*).

CONOCER LA REALIDAD DE GUINEA ECUATORIAL EN 3 MINUTOS

PARA FIRMAR LA PETICIÓN AL GOBIERNO DE ESPAÑA PARA QUE INTERVENGA

NOTICIA SOBRE EL ATAQUE SEDE DEL PARTIDO OPOSITOR

COMUNICADO DEL PARTIDO CANDIDATURA INDEPENDIENTE DE GUINEA ECUATORIAL

RECLAMO DEL CI POR LOS ENCARCELADOS, TORTURADOS Y MUERTOS

*JESÚS CONDENA LA INDIFERENCIA Y LA OMISIÓN
Cuando el Hijo del Hombre venga en su gloria, y todos los santos ángeles con él, se sentará en su trono de gloria, y todas las naciones serán reunidas ante él. Entonces él apartará a los unos de los otros, como aparta el pastor a las ovejas de los cabritos.
Entonces dirá también a los impíos: “¡Apártense de mí, malditos! ¡Vayan al fuego eterno, preparado para el diablo y sus ángeles!
Porque tuve hambre, y no me dieron de comer; tuve sed, y no me dieron de beber; fui forastero, y no me recibieron; estuve desnudo, y no me cubrieron; estuve enfermo, y en la cárcel, y no me visitaron.”
Ellos, a su vez, le preguntarán: “Señor, ¿cuándo te vimos con hambre, o con sed, o forastero, desnudo, enfermo, o en la cárcel, y no te servimos?”
Y él les responderá: “De cierto les digo que todo lo que no hicieron por uno de estos más pequeños, tampoco por mí lo hicieron.”
Entonces éstos irán al castigo eterno, y los justos irán a la vida eterna.
Mateo 25.31-32 y 41-46 (RVC adaptada)