Esta nota fue publicada el 12 de septiembre de 2018 y no pierde actualidad.

Cuando Pablo fue perseguido con muchas acusaciones sin pruebas, eludió ser juzgado ante sus acusadores.
Buscando justicia y consciente de su misión, apeló para ser juzgado por el máximo magistrado: César.

Es triste cuando nos vemos forzados a evitar a jueces y jurados, tales como denuncia el salmista en su oración vindicadora, recordándole a Dios:
“Tú no eres amigo de esos reyes inicuos
que con la ley en la mano violan la ley.” Salmo 94.20 RVC
El Talmud declara: “Desgraciada la generación cuyos jueces merecen ser juzgados”.

Si algo caracteriza a este tiempo que nos toca vivir es la INJUSTICIA generalizada.
Emanada del poder que dicta leyes injustas, que son en sí mismas estricta violencia, atraviesa juzgados cuyos jueces interpretan las legislaciones a su arbitrio, generalmente, unido a los intereses de los poderosos; así, llega a despojar al pueblo y los inocentes sufren.

Sin embargo, no estamos solos.
Aún en este mundo impío, el poder de la RESURRECCIÓN está activo y nos libra de la mano de la IN-JUSTICIA.

JUECES EMPERADORES, lacayos y serviles oportunistas, quedan desairados cuando el JUEZ de los jueces, que juzgará a muertos y vivos, toma nuestra mano para librarnos de esas redes malvadas, tal como lo enseña el hermano Leopoldo Marechal: “de los laberintos se sale solo por arriba”.
Nada nos detiene.
Veremos caer toda soberbia y maldad legalizada.

JESÚS NOS LIBRA DE LA MUERTE
JESÚS NOS LIBRA DE LA INJUSTICIA
JESÚS RESUCITA NUESTROS SUEÑOS
JESÚS ES NUESTRA ESPERANZA

PS: humilde interpretación de mi devocional de hoy.
Palabra que arropa con paz en tiempos desapacibles.

TEXTOS BÍBLICOS

ELECCIÓN DE JUECES BUSCANDO JUSTICIA
“Cuando Pablo llegó, lo rodearon los judíos que habían ido desde Jerusalén. Presentaron en su contra muchas y graves acusaciones, pero no pudieron probar ninguna.
Pablo, en su defensa, dijo: «Yo no he cometido ningún delito. Ni contra la ley de los judíos, ni contra el templo, ni contra el emperador.»
Pero Festo, que se quería congraciar con los judíos, le preguntó: «¿Prefieres ir a Jerusalén, para que seas juzgado de todo esto delante de mí?»
Y Pablo respondió: «Yo estoy ante el tribunal del emperador, y es en este tribunal donde debo ser juzgado. Como tú bien sabes, en nada he agraviado a los judíos.
Si he cometido algo que merezca la pena de muerte, no me rehúso a morir. Pero si las acusaciones que se me hacen no tienen sustento, nadie puede entregarme a ellos.
¡Yo apelo al emperador!»
Entonces Festo habló con el consejo y, después de consultar con ellos, respondió: «Puesto que has apelado al emperador, ante el emperador comparecerás.»”
Hechos de los Apóstoles 25.7-12 RVC

RESURRECCIÓN
“Cuando entraron en el sepulcro, vieron que en el lado derecho estaba sentado un joven, vestido con una túnica blanca. Ellas se asustaron, pero el joven les dijo: «No se asusten. Ustedes buscan a Jesús el nazareno, el que fue crucificado. No está aquí. Ha resucitado. Miren el lugar donde lo pusieron.
Pero vayan ahora y digan a sus discípulos, y a Pedro: “Él va delante de ustedes a Galilea.” Allí lo verán, tal y como él les dijo.»”
Evangelio de Marcos 16.6-7 RVC

Evangelio de Marcos 16.6-7 RVC

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